Después de tener un bebé, puede que no te sientas como tú misma, y eso es normal. Tu cuerpo ha cambiado, tu horario está patas arriba y tu cerebro probablemente esté llena de café y adrenalina.
Algunos días, puede que te mires al espejo y te sientas como una versión descolorida de ti mismo. No roto, solo… menos brillante.
Ahí es donde entra la idea de "recuperar el color rosa". Está inspirada en los flamencos, que pierden parte de su color rosa mientras cuidan a sus polluelos. Toda la energía que aportan durante esa temporada se refleja en sus cuerpos, igual que en el tuyo. Pero con descanso, alimentación y tiempo, recuperan su color. Y tú también puedes.
No se trata de recuperarse. Se trata de sanar, reconectar con tu cuerpo y recordar que sigues siendo tú, aunque tu ropa y tu horario de sueño sugieran lo contrario.
Hablamos con Robin Giles , enfermera certificada en obstetricia y ginecología de Banner – University Medicine, sobre formas de reconectarse suavemente con su cuerpo y sentirse más usted mismo nuevamente.
Recuperar el color rosa después del embarazo
1. Movimiento suave para reconectar con tu cuerpo.
No necesitas ir al gimnasio ni quemar grasa. El movimiento suave suele ser el mejor punto de partida, con actividades como caminatas cortas, respiración profunda, estiramientos o yoga posparto ligero.
“La recuperación posparto es un proceso, no una fecha”, dijo Giles. “La experiencia de cada persona es única y puede depender de factores como si tuviste un parto vaginal o por cesárea, si tuviste un solo bebé o varios, o si tuviste afecciones como la preeclampsia o la diabetes gestacional. Incluso tu edad puede afectar la rapidez de tu recuperación”.
¿Su consejo? Tómate el tiempo que necesites. Descansa. Muévete con suavidad. Recupera fuerzas poco a poco. "Puede que todavía no te queden esos vaqueros ajustados, y es normal", dijo Giles. "Este 'cuarto trimestre' es tan especial como los otros tres".
El movimiento simple no se trata de perder peso. Se trata de reconectar con tu cuerpo, recuperar la confianza y sentirte presente de nuevo. Aquí tienes algunos consejos sobre ejercicios suaves para el posparto .
2. Ropa que se siente bien y tiene sentido.
Puede que tus jeans favoritos ya no te queden bien, pero recuerda que tu cuerpo acaba de hacer algo increíble. Ahora necesita comodidad y soporte, no cinturas apretadas ni frustración en el armario.
Elige ropa que se adapte a tus movimientos. Leggings suaves, blusas holgadas, capas de ropa adecuada para la lactancia y sujetadores elásticos pueden ayudarte a sentirte más cómoda durante el día.
“Que sea sencillo y cómodo”, dijo Giles. “Tu tiempo y energía serán limitados”.
Si puedes, abastécete antes de que nazca el bebé. "Ten suministros como compresas y sujetadores de lactancia listos antes del parto", dijo Giles.
No necesitas un armario nuevo para sentirte bien. Simplemente compra algunas prendas que se adapten a tu vida actual y te ayuden a vivirla con menos estrés.
3. Cuidado de la piel y autocuidado que alivian
Las estrías, la piel seca y la caída del cabello son comunes después de tener un bebé. Tu piel se está adaptando a los cambios hormonales, igual que tú.
Usa productos suaves y sin perfume que hidraten y brinden un alivio calmante. Las lociones espesas, los bálsamos cicatrizantes y las toallitas suaves son buenas opciones. Mantén la ducha tibia (no caliente) y sécate la piel con palmaditas suaves para evitar irritación adicional.
También beba suficiente agua, especialmente si está amamantando.
4. Encuentra tu feminidad de nuevas maneras
Entre la falta de sueño y el dolor en todo el cuerpo, puede que no te sientas muy femenina ahora mismo. Y no pasa nada.
Pero la feminidad no se trata de maquillaje ni de ropa. Se trata de cómo te sientes en tu cuerpo.
Encuentra pequeños momentos para reconectar con esa parte de ti. Baila en la cocina con tu bebé en brazos. Enciende una vela durante la siesta. Escribe unas líneas en un diario.
“Mantén los pies en la tierra”, dijo Giles. “No te compares con lo que ves en las redes sociales. Eso no es la vida real”.
No eres menos femenina porque tu cuerpo se vea diferente. Sigues siendo tú, quizás con un poco más de sabiduría y mucho más amor.
5. Intimidad en tus propios términos
Puede que el sexo sea lo último en lo que pienses ahora mismo, o puede que sea algo que te dé curiosidad, pero te dé miedo explorar. Sea como sea, no hay un momento ideal ni ideal.
Tu cuerpo necesita tiempo para sanar. Consulta con tu médico en tu revisión posparto antes de reanudar la actividad sexual .
“Asegúrate de que tu médico te dé el visto bueno”, dijo Giles. “Y recuerda, si estás amamantando, la sequedad vaginal es común. Usa un lubricante si es necesario”.
La comunicación abierta con tu pareja es importante. Hazle saber cómo te sientes física y emocionalmente. Empieza con pequeños gestos de cercanía, como abrazarse, tomarse de la mano o pasar un rato tranquilo juntos.
Y no te olvides de los anticonceptivos. «Hay opciones seguras, incluso durante la lactancia», dijo Giles. Habla con tu médico sobre qué es lo mejor para ti.
6. Date tiempo y amabilidad
La sanación no es lineal. Algunos días te sentirás fuerte. Otros, simplemente cepillarte los dientes se siente como una victoria.
Libérate de la presión de hacerlo todo o de recuperarte. El progreso no es una línea recta. Es un camino lento y sinuoso lleno de pañales, golosinas, emociones y crecimiento.
“Sé amable contigo mismo en estos tiempos de cambio”, dijo Giles. “Tu salud mental es tan importante como tu salud física”.
Duerme siestas cuando puedas. Come alimentos que te den energía. Bebe agua. Acepta cuando alguien te ofrezca ayuda y pide lo que necesites cuando no la necesites.
Anota tus sentimientos. Habla con un amigo. Respira hondo varias veces cuando el día se ponga difícil. No estás fracasando; te estás adaptando.
7. No tienes que hacer esto solo
Ser madre primeriza puede resultar aislante. Es fácil creer que todo el mundo lo tiene todo bajo control cuando lloras con un café frío a las 3 de la mañana.
Pero no estás solo y no se supone que debas hacer esto solo.
“Busca una comunidad y un vínculo afectivo”, dijo Giles. “Hay muchísimos grupos de apoyo, tanto en línea como presenciales. Muchos son gratuitos y es fácil unirse”.
Si se siente abrumado, ansioso o triste más de lo habitual, hable con su proveedor o un especialista en salud mental.
Otros recursos de apoyo:
- Apoyo posparto internacional
- Grupo de apoyo virtual de embarazo y posparto
- “Tú puedes con esto: Una guía de bolsillo para la salud mental materna”
- 988 Línea de vida para el suicidio y la crisis
Pedir ayuda no es señal de debilidad. Es señal de fortaleza y un paso hacia la sanación.
Llevar
Lo diste todo para traer a tu bebé al mundo. Ahora es momento de cuidarte también.
Si está lista para volver a sentirse mejor, programe una consulta de bienestar posparto. Su profesional de la salud puede ayudarle a evaluar su estado físico, emocional y demás.